El Grupo Ureta Tizona Burgos sumó una nueva victoria tras imponerse al Odilo FC Cartagena CB en un encuentro en el que despliegue táctico y el acierto en los momentos clave permitieron a los de Salva Camps sellar el triunfo frente a un debutante en la categoría que no lo puso fácil gracias a la gran actuación de Dylan Van Eick. Camps tuvo la baja de última hora de Simeounovic afectado por gripe, igual que Mo Soluade, que también se perdió el partido. Totte Alonso, aunque entró en convocatoria, no disputó ningún minuto.
El partido comenzó con Tizona mostrando su mejor versión. El equipo burgalés tomó rápidamente la delantera, con un juego ordenado y efectivo que le permitió adelantarse en el marcador. Sin embargo, el talento del base Gerard Blat, del conjunto murciano, emergió para dar la vuelta al partido. Con un ritmo dinámico y gran efectividad, Blat lideró un parcial que puso a Cartagena por delante, obligando al Tizona a ajustar su planteamiento. Se dio paso a un partido de ida y vuelta con un intercambio constante de canastas. Ambos equipos mostraron un nivel muy similar, reflejando la intensidad de dos rivales que no querían ceder terreno.
Sin embargo, cuando Jaume Lobo asumió el protagonismo, el partido quedó roto. Dos triples consecutivos, fruto de un fallo defensivo del Cartagena, rompió la igualdad y puso a los azulones con una ventaja que no soltarían (19-11). El acierto acompañó a Tizona y minó la moral de los visitantes, que no lograron reponerse en el tramo final del primer cuarto para acabar 28-18.
Rogers inauguró el periodo pero los de Salva Camps no se dejaron intimidar y subieron la intensidad en ambos lados de la cancha. Liderados por un inspirado Thiam y la conexión coral del equipo, el Tizona se puso en «modo rodillo» para alcanzar una ventaja de 20 puntos. Por su parte, Cartagena parecía fuera del encuentro, incapaz de frenar el vendaval burgalés. Solo Jordá y Van Eick lograban mantener a los visitantes con vida, aunque sus esfuerzos eran insuficientes frente a un Tizona imparable.
No obstante, dos triples consecutivos de Hermanson y Jordá revivieron a Cartagena, reduciendo la brecha a 49-36 y obligando a Salva Camps a pedir un tiempo muerto. La pausa fue aprovechada por los visitantes para ajustar su estrategia, lo que permitió un leve resurgir antes del descanso, a pesar de la desafortunada lesión de Ogochukwu, que tuvo que abandonar el partido.
El físico de Keita, quien se estrenaba ante su afición, fue crucial para frenar el embate liderado por Van Eick, quien cerró el segundo cuarto con un triple que dejó el marcador en 55-43, manteniendo a Cartagena en la lucha.
El paso por vestuarios trajo consigo un cambio radical en el guion del encuentro. Los burgaleses comenzaron con poca precisión, lo que permitió a un Cartagena liderado por un espectacular Van Eick reducir la diferencia. Con una plantilla limitada a solo nueve jugadores disponibles, los visitantes supieron maximizar cada oportunidad, encontrando oro en cada jugada para colocarse 58-52 en el marcador.
Tizona, lejos de su mejor versión, sufrió para frenar el recital personal de Van Eick, quien se echó el equipo a la espalda y lideró una remontada que puso a los murcianos a un paso de tomar el control del partido. Los triples de Jordi Rodríguez y Jauma Lobo parecieron dar algo de oxígeno a los locales, pero Cartagena, con una gran movilidad y capacidad para penetrar al aro, consiguió desajustar la defensa burgalesa hasta igualar el marcador a 69-69, con Cabrera como protagonista del empate. El parcial se cerró con un tiro libre de Keita que dejó a los de Salva Camps con una mínima ventaja (70-69).
El último cuarto comenzó con igualdad máxima. Lance Jones abrió el marcador para Tizona, pero Hermanson respondió rápidamente para empatar el encuentro. Sin embargo, los problemas de faltas comenzaron a minar las opciones de los visitantes, agravados por la ausencia de Ugochukwu, cuya lesión dejó a Cartagena sin rotación interior. Este contexto, junto con el nerviosismo que apareció en los de Jordi Juste, permitió a un menos fatigado Tizona abrir una ligera brecha (79-73).
Cartagena no bajó los brazos y Hermanson siguió inspirado, aprovechando dos errores consecutivos de Tizona para mantener a su equipo con vida. Pero el talento de Jordi Rodríguez salió a relucir en los momentos clave, colocando a los locales con una ventaja de seis puntos que les dio algo de tranquilidad.
El desgaste físico empezó a pasar factura a Cartagena, pero su lucha se mantuvo hasta la quinta falta de Van Eick, quien fue sancionado con una técnica por flopping. Esta acción fue un golpe definitivo para los visitantes, mientras que Tizona, fiel a su estilo, buscó soluciones para asegurar el triunfo. Aunque Gil intentó dar un último aliento a Cartagena con un triple, el cansancio hizo mella, y los burgaleses supieron cerrar el partido con solvencia.
FICHA TÉCNICA:
103- Grupo Ureta Tizona: Keita (17), Pacheco (7), Seoane (0), Díaz (14) y Jones (14) – cinco inicial – Rodríguez (16), Lobo (21), Vilà (5), Simeunovic (-), Alonso (-), Thiam (7), Alonso (2).
96- Odilo FC Cartagena CB: González (6), Blat (10), Jorda (18), Hermanson (18) y Ugochukwu (3) – cinco inicial – Cabrera (7), Martín (0), Van Eick (18), Gil (10), Rogers (6).
Parciales: 28-18 / 27-25 (55-43) / 16-27 (71-70) / 32-26 (103-96)
Árbitros: Daniel Checa, Jorge Baena y Alejandro Calvo. Eliminado por cinco faltas Van Eick
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 11.ª de la Primera FEB celebrado en el Polideportivo Municipal de El Plantío.