El Grupo Ureta Tizona y el pívot nacional Ramón Vilà han llegado a un acuerdo para convertirse en jugador de conjunto burgalés para formar parte del equipo azulón esta temporada. El pívot cuenta con una amplia experiencia en LEB Oro y ha disputado dos temporadas en la Liga Endesa con el Casademont Zaragoza y el Covirán Granada y llega a Burgos con ganas de “volver a disfrutar del baloncesto”.
Ramón Vilà comenzó su carrera deportiva en el Sabadell donde comenzó a dar sus primeros pasos hasta llegar a la cantera del Barça en 2015. Con 16 años debutaría en el filial blaugrana en LEB Oro en la temporada 2013-2014. En las temporadas siguientes, el pívot continuó en las categorías inferiores, intercalando partidos con el segundo equipo en LEB Plata. Sería en la temporada 2015-2016 cuando firmaría un buen año con el Barça B en Oro, donde promedió 5,3 puntos y 3,7 rebotes en los 29 partidos que disputó.
Con 18 años, Ramón buscó continuar su formación en Estados Unidos, jugando en los “Sun Devils” de la Universidad de Arizona por temas académicos donde disputó media temporada. La siguiente campaña recaló en el Chattanooga Tennessee donde jugó dos temporadas promediando 13,3 puntos y 5,7 rebotes.
En su regreso a España, Vilà fichó por el Levitec Huesca de LEB Oro donde cuajó una gran actuación con 14 puntos, 6,8 rebotes y 16,8 créditos de valoración, lo que le hizo dar el salto a la Liga Endesa la temporada siguiente con el Casademont Zaragoza donde disputó casi seis minutos por partido, promediando 2 puntos y 0,5 rebotes.
Tras su paso por la Liga Endesa, Ramón recaló en el Covirán Granada de LEB Oro donde promedió 7,6 puntos por partido y 3,5 rebotes, consiguiendo el ascenso del conjunto andaluz a la ACB, donde permanecería la pasada temporada donde promedió 2 puntos y 1,1 rebotes. Vilà también ha recorrido parte de su carrera en las categorías inferiores de la Selección Española donde ha conseguido la medalla de oro en el europeo U20 de Finlandia en 2016 y otro título continental en Ucrania con la selección U16 en 2013.
La falta de minutos en la primera categoría nacional ha hecho que el pívot catalán recale en el Grupo Ureta Tizona en busca de “volver a disfrutar del baloncesto”. Vilà explica su incorporación al Tizona “por las ganas de formar parte de un proyecto muy chulo en una ciudad que me han contado que es una maravilla”, aunque la presencia de Diego Ocampo ha declinado la balanza para el pívot que afirma que ha llegado a Burgos por “el entrenador, que es de un perfil que a mí me gusta y creo que puede sacar lo máximo de mí”.
Ramón espera conseguir “que el equipo compita”. “Se mantiene un bloque muy grande de jugadores del año pasado y somos unos pocos los que nos incorporamos al equipo y hay que conseguir la dinámica tan positiva que tuvieron el año pasado y mantenerla este año, competir al máximo y soñar en cosas grandes”, añade.
El pívot se marca como objetivo principal “volver a disfrutar del baloncesto como jugador dentro de la cancha, ya que la temporada pasada no pude tener demasiados minutos, y ayudar al equipo en lo máximo que pueda”, explica. Vilà quiere “entrenar a tope y seguir las instrucciones del entrenador y hacer lo que me pida”, expone. Ramón afirma que tiene “muchísimas ganas de llegar a Burgos para empezar los entrenos lo antes posible” y envía un mensaje a la afición: “espero contar con vuestro apoyo durante la temporada y yo os prometo que voy a dar el cien por cien de mí”.
